Estaba atrapada. No quedaba nada de mí.
Luego él vino y quiso hacerme suya.
Él me salvó. Me dio un hogar, una familia.
Me hacía el amor dulcemente.
Yo era su Ángel. Él era mi todo.
Creía que viviríamos felices para siempre, pero no hay finales felices en la vida de la mafia.
Descubrí esto de la manera difícil, mientras la sangre fluía, roja como las rosas...
Lyov.
Ángel. La palabra no significaba nada hasta que la vi.
La encontré en un lugar peor que el infierno. Ella me llama su salvador.
Pero no la salvé. Capturé al bonito Ángel y la hice mía.
La vida era perfecta. Tenía todo lo que quería.
Yo fui su salvación. Ella fue mi redención.
Hasta que la perdí.
Los Ángeles merecen finales felices, pero los monstruos como yo no.
Mi oscuridad se convirtió en la de ella, y nuestro feliz para siempre se contaminó.
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